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Vassily Kandinsky, pintor y teórico ruso, precursor del arte abstracto y uno de los más grandes representantes de las vanguardias de comienzos del siglo XX, escribió en la introducción de su obra Sobre lo espiritual en el arte: “Toda creación de arte es gestada por su tiempo y, muchas veces, gesta nuestras propias sensaciones. De esta manera, toda etapa de la cultura produce un arte específico que no puede ser repetido. Pretender resucitar premisas artísticas del pasado puede dar como resultado, en el mejor de los casos, obras de arte que son como un niño muerto antes de ver la luz”. Al margen de las consideraciones estéticas de sus obras, una de las grandes aportaciones de Kandinsky fue su interpretación del arte como una búsqueda constante. Un querer ir más allá siempre, preguntándose -y lanzando preguntas a sus contemporáneos- acerca de la existencia humana. Por eso las imitaciones del pasado para él eran cadáveres, zombies que podían moverse, incluso hacer fortuna, pero que en realidad estaban muertos al nacer. El artista, aseguraba el ruso, está obligado siempre a mirar más allá. ¿Hacia dónde debe mirar hoy el arte? ¿Cuál es su función en un mundo digital, híperconectado y en constante cambio?
Para Mónica Bello, la española que dirige el programa Arts at CERN, la respuesta está en las imbricaciones que pueden surgir entre la creación artística y la investigación científica: “Arte y ciencia no responden preguntas cuando están juntos, sino que formulan nuevas cuestiones. Los artistas lo hacen de una manera no formal, fuera de los estándares, y esto es un gran atractivo para los científicos”. Arts at CERN, una iniciativa de la Organización Europea para la Investigación Nuclear, promueve desde 2011 esta colaboración a través de visitas y residencias de artistas a su centro.
El Gran Colisionador de Hadrones instalado en el CERN, el más potente del mundo, nos ha permitido simular el Big Bang, atrapar átomos de antimateria o analizar el comportamiento del enigmático Bosón de Higs, la llamada “partícula de Dios”. Descubrimientos todos de un nivel de abstracción casi poético, tan hermosos en su concepción como el arte. Al juntar artistas de renombre mundial, aquellos que están en esa búsqueda de lo que hay más allá de lo evidente, el CERN quiere explorar elementos más vaporosos incluso que el origen del Universo: la ingenuidad humana, su creatividad y la imaginación. Arts at CERN convierte la física de partículas en una de las bellas artes.
“Es importantísima la creatividad en la ciencia, asegura Bello, sobre todo en este ámbito, en el de la física fundamental, la física de partículas, porque tienes que estar preparado para imaginar lo inimaginable”. Ese algo inasible, que ha impulsado al ser humano en sus mejores búsquedas, también lo anticipó Kandinsky, cuando anticipaba el surgimiento de “un hombre muy semejante a nosotros pero que posee en su interior una fuerza misteriosa y adivinatoria. Este hombre contempla y enseña”. Sin duda, el genio ruso habría sido feliz en el CERN.
Texto: José L. Álvarez Cedena
#VodafoneOne
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Vassily Kandinsky, pintor y teórico ruso, precursor del arte abstracto y uno de los más grandes representantes de las vanguardias de comienzos del siglo XX, escribió en la introducción de su obra Sobre lo espiritual en el arte: “Toda creación de arte es gestada por su tiempo y, muchas veces, gesta nuestras propias sensaciones. De esta manera, toda etapa de la cultura produce un arte específico que no puede ser repetido. Pretender resucitar premisas artísticas del pasado puede dar como resultado, en el mejor de los casos, obras de arte que son como un niño muerto antes de ver la luz”. Al margen de las consideraciones estéticas de sus obras, una de las grandes aportaciones de Kandinsky fue su interpretación del arte como una búsqueda constante. Un querer ir más allá siempre, preguntándose -y lanzando preguntas a sus contemporáneos- acerca de la existencia humana. Por eso las imitaciones del pasado para él eran cadáveres, zombies que podían moverse, incluso hacer fortuna, pero que en realidad estaban muertos al nacer. El artista, aseguraba el ruso, está obligado siempre a mirar más allá. ¿Hacia dónde debe mirar hoy el arte? ¿Cuál es su función en un mundo digital, híperconectado y en constante cambio?
Para Mónica Bello, la española que dirige el programa Arts at CERN, la respuesta está en las imbricaciones que pueden surgir entre la creación artística y la investigación científica: “Arte y ciencia no responden preguntas cuando están juntos, sino que formulan nuevas cuestiones. Los artistas lo hacen de una manera no formal, fuera de los estándares, y esto es un gran atractivo para los científicos”. Arts at CERN, una iniciativa de la Organización Europea para la Investigación Nuclear, promueve desde 2011 esta colaboración a través de visitas y residencias de artistas a su centro.
El Gran Colisionador de Hadrones instalado en el CERN, el más potente del mundo, nos ha permitido simular el Big Bang, atrapar átomos de antimateria o analizar el comportamiento del enigmático Bosón de Higs, la llamada “partícula de Dios”. Descubrimientos todos de un nivel de abstracción casi poético, tan hermosos en su concepción como el arte. Al juntar artistas de renombre mundial, aquellos que están en esa búsqueda de lo que hay más allá de lo evidente, el CERN quiere explorar elementos más vaporosos incluso que el origen del Universo: la ingenuidad humana, su creatividad y la imaginación. Arts at CERN convierte la física de partículas en una de las bellas artes.
“Es importantísima la creatividad en la ciencia, asegura Bello, sobre todo en este ámbito, en el de la física fundamental, la física de partículas, porque tienes que estar preparado para imaginar lo inimaginable”. Ese algo inasible, que ha impulsado al ser humano en sus mejores búsquedas, también lo anticipó Kandinsky, cuando anticipaba el surgimiento de “un hombre muy semejante a nosotros pero que posee en su interior una fuerza misteriosa y adivinatoria. Este hombre contempla y enseña”. Sin duda, el genio ruso habría sido feliz en el CERN.
Texto: José L. Álvarez Cedena
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Arts@CERN: la fascinante suma de física de partículas y bellas artes elton john | |
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MrAvilaba Science & Technology | Upload TimePublished on 13 Jul 2016 |
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